Blogia
Osiris

Gilipollas

Me pasó en el colegio.
También me ocurrió en la universidad, cuando hablé con aquel profesor sobre la imposibilidad de hacer la práctica con los laboratorios cerrados.
Me pasó cuando fui a arreglar mi viejo coche al taller.
Y también al solicitar por enésima vez en la ventanilla del banco que me diera el código para gestionar mis cuentas desde casa.
Me ha vuelto a pasar esta mañana.

Hablas con alguien. Lo encajas. Incluso sientes algún tipo de empatía.
Luego sales, te sientas y piensas "¿la gente pensará que soy gilipollas?".

Habrá que mirar hacia delante.

4 comentarios

q256 -

No se puede decir más con menos palabras. Me ha encantado la forma en que has redactado el post, un fantástico uso del lenguaje.

Sigue así :)

Javier Torres -

Mi anecdotario es amplísimo, y sin salir de la Uni te podría contar muchos.
El mejor, un bedel llamado Antonio que se quiso pasar conmigo, cien pueblos no..., de Algeciras a Estambul.

¡Menudos lumbreras!

Abrazos, J. ;)

Oraculo -

Uno no debe culparse de los errores de los demás. Si la forma en q actuaste en todas esas ocasiones para ti era la correcta , debes estar orgulloso de ello. No todo el mundo tiene la capacidad de diferenciar entre lo "politicamente correcto" y la realidad.
Aunq no es consuelo, a palos se aprende más rapido...
Animo!!! y un besazo

L_Y_R -

Habra gente que lo piense chico tierno... hay mucha otra que piensa todo lo contrario... palabrita de la menda!

muac!