la ironía de la vida
El sexo es la polla.
Puedes tener un encuentro romántico con la mujer de tu vida, rodeado de incienso, a oscuras delante de una chimenea, desnudarla poco a poco, y penetrarla lentamente mirándola a los ojos mientras notas que le pones la piel de gallina y arquea la espalda y tener un orgasmo de mierda del que apenas te das cuenta.
Puedes cascártela en un baño de mala muerte de un bareto de mala muerte un martes noche de mala muerte, rodeado de mierda, borrachos y más mierda y correrte como un cerdo.
Supongo que es otra ironía de la vida.
Siempre que me doy cuenta de ellas me imagino a alguien mirando desde arriba partiéndose de risa señalándote con el dedo. Pues ni puta gracia tiene oiga.
Y todo ello es por culpa de la manía que tiene la humanidad de normalizar y contabilizar la vida. Hay cosas que no se pueden explicar, ni contar, ni medir, ni controlar, ni raciocinar. Y eso nos jode.
- ¿me quieres?
- supongo
- pero, ¿cuánto? ¿mucho o poco?
- hasta hace dos horas no sabía ni tu nombre, no juegues con fuego.
Uno puede pensar que algo tan superado como vivir puede resultar medianamente sencillo. Puedes vivir de puta madre, dormir todos los días junto a modelos del playboy con medidas exageradas y edades exageradamente pequeñas, fumarte un habano en el desayuno todos los días mientras piensas qué coche conducir hoy, y darte un infarto cerebral.
Toma ironía a patadas y carcajadas desde arriba.
La putada es que puedes vivir en un piso de 50 metros, con tus 5 hijos drogatas y tu mujer insufrible, tener un trabajo de 12 horas moviendo vigas de cuatrocientos quilos que no te da ni para comer, y, volviendo del trabajo en el autobús más lleno de todo el país y parte de la commonwealth, darte un infarto cerebral.
Aunque acabes igual, uno muere mientras le atiende su mayordomo y entre los humos de un habano y el otro muere entre los olores a sobaco rancio y no le atiende nadie.
No me jodas, además de irónica, la vida es injusta del carajo.
Un día te levantas y te pones a pensar que todo son gilipolleces, cosas inevitables por las que todo el mundo tiene que pasar; te lo tomas con filosofía mañanera y hasta sonríes un poquito. Hasta que descubres que alguien te ha rallado otra vez el coche, y entonces sabes que a partir de ahí el día va a ir a peor.
Y estando en estas cábalas viene la vecina y te suelta una perla: "tía que los perros son muy buenas personas, que se enteran de todo", te despiertas, te desconcentras y piensas que bueno, que tampoco está tan mal el tema éste y que qué se le va a hacer.
Resulta irónico.
Puedes tener un encuentro romántico con la mujer de tu vida, rodeado de incienso, a oscuras delante de una chimenea, desnudarla poco a poco, y penetrarla lentamente mirándola a los ojos mientras notas que le pones la piel de gallina y arquea la espalda y tener un orgasmo de mierda del que apenas te das cuenta.
Puedes cascártela en un baño de mala muerte de un bareto de mala muerte un martes noche de mala muerte, rodeado de mierda, borrachos y más mierda y correrte como un cerdo.
Supongo que es otra ironía de la vida.
Siempre que me doy cuenta de ellas me imagino a alguien mirando desde arriba partiéndose de risa señalándote con el dedo. Pues ni puta gracia tiene oiga.
Y todo ello es por culpa de la manía que tiene la humanidad de normalizar y contabilizar la vida. Hay cosas que no se pueden explicar, ni contar, ni medir, ni controlar, ni raciocinar. Y eso nos jode.
- ¿me quieres?
- supongo
- pero, ¿cuánto? ¿mucho o poco?
- hasta hace dos horas no sabía ni tu nombre, no juegues con fuego.
Uno puede pensar que algo tan superado como vivir puede resultar medianamente sencillo. Puedes vivir de puta madre, dormir todos los días junto a modelos del playboy con medidas exageradas y edades exageradamente pequeñas, fumarte un habano en el desayuno todos los días mientras piensas qué coche conducir hoy, y darte un infarto cerebral.
Toma ironía a patadas y carcajadas desde arriba.
La putada es que puedes vivir en un piso de 50 metros, con tus 5 hijos drogatas y tu mujer insufrible, tener un trabajo de 12 horas moviendo vigas de cuatrocientos quilos que no te da ni para comer, y, volviendo del trabajo en el autobús más lleno de todo el país y parte de la commonwealth, darte un infarto cerebral.
Aunque acabes igual, uno muere mientras le atiende su mayordomo y entre los humos de un habano y el otro muere entre los olores a sobaco rancio y no le atiende nadie.
No me jodas, además de irónica, la vida es injusta del carajo.
Un día te levantas y te pones a pensar que todo son gilipolleces, cosas inevitables por las que todo el mundo tiene que pasar; te lo tomas con filosofía mañanera y hasta sonríes un poquito. Hasta que descubres que alguien te ha rallado otra vez el coche, y entonces sabes que a partir de ahí el día va a ir a peor.
Y estando en estas cábalas viene la vecina y te suelta una perla: "tía que los perros son muy buenas personas, que se enteran de todo", te despiertas, te desconcentras y piensas que bueno, que tampoco está tan mal el tema éste y que qué se le va a hacer.
Resulta irónico.
13 comentarios
Zamyr suárez -
jim -
jim -
samamtha -
pero en realidad bn raro ke mello
lid -
Por cierto, me gusta tu nuevo look verdecín calabacín. Un beso!
goldhands -
Estas mas que invitado a él, pero piensa que allí la felicidad no es acostarte con las chicas del playboy y tener 200 coches... Allí lo bueno es que puedes ser tú mismo sin complejos!
kami -
¿Cuanto son 2 + 2?
Tu eres un tío de ciencias y la sabes. Ese día viste Barrio Sésamo.
Pero si olvidas ponerla, acabas de perder todo lo que has escrito, por muy basado en la prueba de Turing que quiera.
A parte de que 2 + 2 lo sabe sumar un niño de 3 años...
kami -
Esa es una frase que me fascina y que dice más gente de la que pensamos.
El perro es el mejor amigo del hombre porque el hombre le da de comer y porque le da un sitio tranquilo donde dormir.
A cambio, el perro se mea en tu rueda y te jode el esmalte de las llantas que pagas con el sudor de tu frente.
Menuda ironía, ¿no?
Hay gente que tiene más flores en el culo que otros.
La suerte está mal repartida, pero tienes que buscarla para que se acerque a tí.
No le pierdas la pista, quizá puedas llegar a ser asquerosamente rico algún día.
Mescalino -
Saludos
Morocha -
La vida esuna canallada... y esta llena de ironías!!!
Perlanegra -
Un beso
Afrodita -
Pero sí, la vida suele ser así de irónica...
Besos
su -
Tamibén es injusta, hipócrita y muy hija de puta cuando se pone, pero bueno... supongo que ahí está precisamente la gracia.
En ir toreándola y en ser asquerosamente feliz en éste mundo tan ¿? no sé ni qué nombre darle.
Bueno Osiris, no te quejes que tienes ahí cerca a Goldhans ¿no? y en un momento puede llevarte a su mundo Piruleta ;-)
Un beso, y por cierto, muy guapo en la foto ¿ehh? aunque te estés muriendo de calor.