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Osiris

Finde (aparte de trabajar mil)

Finde (aparte de trabajar mil)

Frases de la última semana

"Sé molt bé que des d’aquest bar
jo no puc arribar on ets tu,
però dins la meva copa veig
reflexada la teva llum, me la beuré;
servil i acabat, boig per tu"
              Sau, "Boig per tu"

 

- Eres la ersona más guay que conozco, y ni siquiera tienes que esforzarte
- En realidad me esfuerzo cantidad
                      Juno


"No, no follamos. Creo que de alguna manera, en lo más profundo de mí mismo, no me sentí digno de mezclarme con aquel ángel. Eso y que ella no quiso."
                     Gonzo, "El Sentido de la Vida"

 

- Oye, ¿os habéis fijado que la moda de los pollones ya se está pasando?
                    C

Finde

Últimamente sólo trabajo.
Trabajo y echo de menos.
Como siempre, sólo que ahora salgo menos en bici.

Trabajo mucho sí, pero dicen que sarna con gusto no pica. No lo tengo claro, pero lo cierto es que estoy bastante ilusionado, y no hago más que en pensar en absorber más trabajo, más áreas y proyectos, y en crear un Departamento de Informática de verdad, del que ser responsable. Algo de ambición no viene mal, aunque apenas pueda dormir por la noche, tenga miles de pelis por ver y mis periquitos y plantas me pidan atención.

El jueves trabajé doce horas. Luego me fui a beber cerveza con mis amigos y excompañeros de trabajo. Bebí mucho, y me acordé de que era el cumpleaños de mi madre y la llamé corriendo. Me dijo gracias y seguí bebiendo. Vi croquetas y me acordé de lo mucho que me gustan, aunque no me gusta comerlas solo. A veces puedes sentirte solo entre mucha gente, aunque sean tus amigos. Aunque hayas bebido mucha cerveza.

El fin de semana llegó ayer. De momento me ha dado tiempo a perder las llaves, salir en bici, comprar un libro y una tarta para mi madre, ir a comer con ella y el resto de mi familia en una comida sorpresa, beber martini, cerveza, vino, sangría, beilis y chivas, y ahora ir a Santa Tecla.

Y ya no sé qué más decir.

Ella

Hacía tiempo que se sentía sola. Casi el mismo tiempo que intentaba no pensar en ello.

Sus encuentros con la gente se limitaban al trabajo. Solían ser contactos frugales y mecánicos, aunque intensos, eso no lo podía negar; se consideraba una profesional a pesar de todo.
Normalmente ellos la esperaban con sorpresa pero anhelantes. No dejaba de pensar que era una forma fría de relacionarse con sus clientes.
Hubo un tiempo que intentó innovar en su oficio, pero nadie le ofrecía una palabra de ánimo, ni le reconocía lo difícil de su oficio, que ella trataba siempre de hacer del mejor modo.
Así que regresó al modo tradicional.

Antes no le importaba nada, pero lo años le hacían preguntarse si no se estaba perdiendo algo, limitándose a su tarea y nada más.

De repente se sentía vieja y todavía más sola. Muy sola.

Sacudió la cabeza tratando de olvidar sus cábalas.
Volvió a pasar una vez más la piedra por la hoja para reforzar el resplandor azul que emitía. Y se asomó fuera. La noche había caído, a pesar de que en su establo no existía el día. Miró el reloj que ocultaba en los pliegues de sus vestiduras resignada. Era la hora.
Se arremangó la túnica y se subió a su caballo, que la recibió animado. Miró adelante, hacia la Nada, y suspiró.
Era un trabajo difícil, pero alguien debía hacerlo.

Frases de la última semana

"Los polvos que dejas escapar nunca vuelven"Una foto de Flickr
                                                Yo a L.

"y si de pronto no te queda dónde ir,
no vengas a buscarme a mí"
                                                "mil millones de veces", Los Planeas

"Yo moriré atropellado
bajo un camión de helados
pero mi tumba estará a tu lado
bajo el árbol que he plantado esta mañana
para que siempre tengas naranjas"
                                                 Para los seres atados (a las condiciones terrenas) de Triángulo De Amor Bizarro.

"¿y ahora os vais de follasca chicos?
                                                 N a Kami y a mi.


- Ahora ya se me ha puesto muy chungo el juego tío.
- ¿Has encontrado una curva de dificultad?
- Nah! que me follan tío, me follan
                                                 Kami a mi

Llueve

Llueve mil.

Y mi ropa se está mojando.

Pero a mí me da igual.

Jaime

Un día besó a su novio y descubrió que ya no la quería.
No pasaba nada, mejor así. Se lo dijo y se fue.
Decidió dejar de besar chicos y chicas y besar ranas.
Comenzó a maquillarse y a ir al gimnasio, pero no le gustaba como le quedaban las mallas y lo dejó.
Otro día comenzó a reír, y ya no pudo parar. Se pasaba los días riendo mientras besaba ranas en las fiestas.
La gente le preguntaba por qué reía y les decía que reía porque de pequeña prefería el azul al rosa, la nata al chocolate y su madre a su padre.
Después tuvo un niño. Le llamó Jaime y siguió riendo y besando ranas.
Otro día más se cayó volviendo de una fiesta. Se rompió la cadera y dejó de besar.
Ya no reía.
Y después murió.
Pero no pasaba nada.
Se lo dijo a Jaime. Le besó y se puso rojo.
Mejor así.

Frases de la última semana

"Transmites paz", pensé. Me encantaba. "Transmites paz" era lo más bonito que nadie me había dicho nunca, quizá más bonito que "Sólo es una contractura" o incluso que "Quiero que te corras en mi boca". Poesía pura en mis pobres oídos.
                                                                   El Sentido de la Vida

 

"29/09/07
Para que leas en el tren. O en el sofá. O en la cama. Y te acuerdes de mí.
Besos"
                                                                   Contraportada de mi libro "El túnel" de Ernesto Sábato.

 

"- Tú diles que tienes la poia grande. El márketing es fundamental en estos tiempos"
                                                                   N.

 

"Merthin se cansó de discutir.
- Lo único que sé es que te amo y que quiero estar contigo.
Ella soltó una risa forzada.
- Si hubieras dicho eso y nada más, tal vez me habrías convencido.
- Estoy confundido -admitió Merthin-. ¿Me estás rechazando o no?.
- No lo sé. -respondió ella."
                                                                   Un mundo sin fin, Ken Follet

 

 

58

El finde terminó.

El domingo Kami, sus compañeros de trabajo y yo fuimos a por la Mussara, la segunda vez para Kami y para mi.
Sin ánimo de ofender, les dimos cremita de la buena, y eso que eran unos "ruedas finas"...


Me lo tomé con bastante calma, acompañando a un compi al principio, y luego charlando con Kami. Al final paré el crono en 58 minutos, once más que el día anterior. Seguro que además del cansancio, tuvo algo que ver el acohol y el tabaco del día anterior.


Después de subir, camino a Prades y almuerzo-comida, mucho menos copioso que con los de la peña, la verdad...

Y como somos unos machotes,
Kami y yo nos depedimos de los demás y volvimos al coche en bici, con lluvia de por medio. A esas alturas las piernas ya estaban en casa durmiendo la siesta, y un servidor hizo la bajada de la Mussara hasta con pereza de frenar.


Finalmente han sido más de 120 kilómetros en todo el finde, aunque ya me he hartado de carretera y estoy deseoso de brincar como las cabras por los caminos.


Sorprendentemente ni mi compañero de penas ni yo estamos excesivamente cansados. ¡O somos unos machotes o vamos de dopping hasta las cejas!
Como única nota negativa, el finde me ha dejado las costillas peor. Me duele incluso respirar, y esta noche he dormido fatal porque no sabía ni cómo tumbarme, Tendré que hacer algo... o no, no sé...

Mañana martes otra salida. ¿Qué otra cosa podría hacer?  ;)

47

Ya ha empezado el finde de la muerte: subida a La Mussara + Castillejos el sábado y Mussara + Prades el domingo.

La primera jornada ha sido con la Peña, y ya ha pasado:
en Vilaplana se ha dado el pistoletazo a 11 kilómetros de subida: "a partir de aquí, que cada perro se lama su rabo".

He subido desde atrás con C, he pasado a todo el mundo y he sido acompañado de un simpático señor que sólo hacía que hablar y decirme todo el rato "¡si esto ya está! sólo queda un kilómetro", mientras yo veía que quedaban seis marcado en el suelo.

También me han acompañado un equipo amateur de una multinacional belga, a los que realmente tampoco se les veía demasiado finos (sin ánimo de sobradez). He ido enganchándome de rueda en rueda a medida que me pasaban. Poniéndome a 190 en ocasiones. Pero esa no era mi guerra, y mi dicharachero compañero de penas me recordaba que mi pneumático hacía tres de los suyos, lo cual me consolaba relativamente.
Además cada vez que me levantaba del sillín el punzante dolor en las costillas que sufro desde la semicaída del martes me hacía sentarme de nuevo.

Cuando he llegado arriba los belgas tenían coche escoba y avituallamiento. Reían y comían plátanos. Por ese orden.
Yo he hecho medio camino hacia los repetidores (estaba en uno de los puntos más altos de la comarca, y porque no me atrevo a asegurar que sea el que más), he soltado una reconfortante meada y he consultado el móvil: había coronado el puerto de primera en 47 minutos, había fulminado mi anterior registro (de hace tres años creo recordar con mi memoria de pez) de una hora y poco.
Y miraba el móvil queriendo contárselo a alguien, para compartir la ilusión que me hace sentirme tan fuerte últimamente. Pero no sabía a quién decírselo: C, Ll y N iban detrás y los vería en breves minutos, a A no correspondía para nada y a P o L no le interesarían mis pinitos ciclistas.

Con el móvil en la mano, en mi cabeza sonaban retazos de "La buena vida":
Partiré hacia el final, no se si podré llegar
otros lo intentaron antes ya.
Es en la dificultad, donde encuentro mi lugar
con una misión por completar.
Ese es mi hábitat normal.

Como me gustaría poderte relatar, mis aventuras al llegar.
Las maravillas que encontré al acercarme al astro rey.
Cien mil estrellas que casi podría coger.
La inmensidad que contemplé.

Cuando nos perdió control y la atmósfera estalló,
nos quedo clara la situación:
se había terminado la función.

Me dabas fuerzas para continuar mi aventura espacial.
Y no te la podré contar...
Y no te lo podré contar...



A los cinco minutos han asomado N y S, luego Ll y al poco C. Seguidamente han empezado a gotear el resto.
Después de aplausos varios, camino a Castillejos buscando el almuerzo en Alforja.
Como es habitual, comida copiosa y alcohol abundante.
Y risas.
Muchas risas.
No en vano todos hemos pulverizado los tiempos del año pasado en la etapa reina, y había que celebrarlo.

Vuelta a casa y tras ver la pulsaciones dispararse quité el pulsómetro, sólo quedaba disfrutar del resto del camino y del champú fresquito.

Ducha, siesta y masajito en las piernas para que se relajen.

Mañana más y mejor.
Espero no tener la misma sensación de soledad esperando.
Aunque siempre puedo echar mano de mi ipod.
Y del dopping.

¿Quién se ha llevado mi libro?

El otro día terminé "Un mundo sin fin". Me encantó, aunque hay que decir que es un libro un poco guarrete: felaciones, curas y monjas dándose placer (eso sí, curas con curas y monjas con monjas, ordenaditos), tríos, orgías.... Vamos, que en la Edad Media se lo pasaban mejor de lo que creía!

Espoleado por un mono lector, busqué un libro en mi estantería de "pendientes", custodiados por un dedo de polvo.
Encontré un disco que me trajo buenos recuerdos, y otro que ni tan sólo recordaba tener.
También encontré un dvd con fotos donde poder ver a la Peña con más pelo y mi antiguo cpd en múltiples planos.
Entre dos libros encontré una nota:

"Yo tengo tu libro de la sombra del viento.
VAL 1 AÑO!
06/03/07
Yo!"


La primera reacción fue descojonarme, claro.
La segunda fue intentar recordar si yo tenía ese libro, aunque sí que sabía que lo había leído.
¡Y la tercera fue pensar quien tenía MI libro!

La letra parecía de mujer, eso restringía bastante el espectro de gente que podía haberme hurtado el libro.

La mañana siguiente despertó con un correo a todas las personas de quien podría sospechar.
Varios "yo no lo tengo", "y a mí qué me dices?", "quién eres?" y "como sigas insistendo llamaré a la policía!" hasta que la culpable dio muestras de arrepentiemiento.

Al final resulta que se lo di yo, me comentó que a lo mejor lo había perdido (me reenvió el mail donde lo comentamos largo y tendido) y hablamos de ello más de una vez...
Al menos he conseguido que me lo devuelva y que me invite a comer por tal agravio.

Total, que como siempre, la culpa es de mi memoria de pez.

PD: Sigo con el dopping. El finde rompo.

Hoy.

Una foto de FlickrHoy me he levantado demasiado temprano. He puesto el partido de baloncesto mientras limpiaba los periquitos.
También he trasplantado el helecho que tenía en mi habitación en una maceta más grande y lo he puesto al lado del sofá.

Después me ha entrado un hambre voraz y me he comido la ensaladilla rusa que tenía preparada para este mediodía y el de mañana lunes. Rondaban las once.
Me he tomado dos cervezas y tres flashes mientras terminaba "Un mundo sin fin" y mis periquitos volvían a darse plaser.

He visto el inicio de la fórmula uno pero me ha aburrido soberanamente.

Me he levantado de la siesta hambriento y me he comido un bocata de nocilla mientras escuchaba a La buena vida.

Después he pensado que estaría bien ir a tomar café con mi madre, ahora que está tan sola.


En cuanto he llegado a su casa me ha entrado un hambre voraz y le he vaciado media nevera. Después me ha invitado a café mientras me contaba los últimos cotilleos del vecindario y yo jugaba con Birrita. También cargaba el móvil porque me quedé ayer sin batería, y el cargador estaba en el trabajo. He recibido varios mensajes y he escrito otro. Me ha llegado un sms avisando de que estaba apunto de comenzar el concierto de Los Planetas en Gijón. He sentido una punzada.
Mi madre me ha despedido regalándome infusiones de sabores y un plato para poner bajo el helecho.

De camino a casa me ha empezado a doler inquietantemente la cadera. Me he comprado unas Juanolas para olvidarlo.
En cuanto he llegado me he puesto a cocinar pasta con pimientos del piquillo y pasas porque se me han antojado.

Mañana vuelta al curro.
Sigo teniendo hambre, espero que no sea por el doping que me estoy chutando.

Doping

¡Síííí!

Una vez más voy a hablar de bici, pero es que mi vida es algo sosa últimamente (los últimos 20 años).

Impulsado por las espectaculares descripciones de Nata, decidí hacerme con un bote de L-Carnitina, para mejorar mis rendimientos deportivos.

He estado investigando y parece ser que el tema este es el mejor invento desde la gaseosa: aumenta el tono muscular, ayuda a la transformación de grasa en energía, reduce la generación de ácido láctico en el músculo, etc...

En la etapa de hoy lo he puesto a prueba. Aunque me ha costado mucho entrar en calor, he ido pendiente de las sensaciones. La verdad es que apenas he notado nada. Lo único ha sido que he encontrado un par de veces espectacular la recuperación de pulsaciones. En un momento subía a más 187 (donde tengo configurado que el pulsómetro me alerte de que me muero) y seguidamente he bajado a 160 y pico. Aunque realmente no sé si atribuirlo al nuevo dopping o a que estoy hecho un mulo.

Lo que no mitiga el jodío dopping es la posición del pedal derecho. Levo toda la tarde con dolor de cadera, creo que esto va a terminal mal.

Total, resumiendo, que ya sólo me queda la EPO. Tengo que comentarle a la doctora del trabajo a ver qué se cuece por los bajos fondos...

El reto I

Hoy (festividad de Sant Magí en Tarragona) he ido a afrontar mi reto: a modo de recordatorio, se trataba de bajar de los 20 minutos subiendo la Teixeta. Me he calzado unas mallas viejas (que se transparentaban escandalosamente) y he ido a buscar a Kami. Una hora después estábamos en la falda de la montaña.

He empezado la escalada muy fuerte, pero controlando. Cuando llevaba 10 minutos y había adelantado a un par de ciclistas de carretera, tenía la sensación de que ya había pasado en mucho la mitad. Iba viento en popa, toda vela.

Dos minutos después me he venido abajo. Las pulsaciones se me han disparado a más de 190 y no lograba controlarlas.

A dos curvas del final cuando el terreno se suaviza, he calzado dos piñones más y he mirado el crono: sobre los 19 minutos...

Última curva, engrano otro piñón y esprinto mientras el pulsómetro se vuelve loco. 19:52, 53, 54.....

paso la línea de referencia y miro fugazmente el crono:

20’ 01’’

Entre estertores de muerte, mareos y arcadas río de mi suerte.

Lo peor es la vuelta, pensando en todos los momentos en los que pude haber perdido dos míseros segundos.
Pero hay que ser positivo, me he demostrado que estoy ahí ahí, un poco de entreno más y ya lo tendré al alcance.

Estoy hecho un chaval.

¿Mí corazón se ha dormido?

  


¿Mí corazón se ha dormido?

Colmenares de mis sueños,
¿ya no labráis? ¿Está seca
la noria del pensamiento,

los cangilones vacíos,
girando, de sombra llenos?
No; mi corazón no duerme.
Está despierto, despierto.
Ni duerme ni sueña; mira,
los claros ojos abiertos,
señas lejanas y escucha
a orillas del gran silencio.

Periquititos

Hoy iba a escribir un artículo serio. Algo maduro y responsable, parecióa un tratado sobre sociología, en serio. Pero llevando buen trecho he visto a mis periquitos fornicando como posesos una vez más. Así que he sonreído tímidamente y lo he borrado todo. Hoy es festivo y no hay que escribir cosas serias.

Desde que tengo uso de razón hay periquitos en mi casa. Todo comenzó cuando mi madre nos compró uno verde a mi hermano y a mí y lo llamamos Cuqui. Desde entonces todos los periquitos son los Cuquis.
A aquel pájaro lo dejábamos suelto todo el día, en la habitación en la que cosía mi madre y en la que prácticamente hacíamos vida.
Recuerdo llorar a raudales cuando Cuqui aterrizó en plato de ensaladilla, y mi madre corrió presta a cambiármelo y a abroncar al responsable.

Hace unas dos semanas que separé una de las dos parejas de periquitos en una jaula aparte con un nido, para que tengan más intimidad para sus carantoñas.
Siempre me ha hecho ilu tener miniperiquitos (que serían periquititos, supongo), pero nunca he pasado de obtener algún huevo del que no ha salido nada.
Pero esta vez parece que a la parejita le ha cogido el tranquillo, y no paran de darse plaser todo el día. ¡Una tarde conté cinco veces! con sus siestas posteriores y todo ¿eh?. Unos sementales, ya te digo. Además han contagiado a la otra pareja, que también se da un capricho de vez en cuando, aunque a menor ritmo, claro.

Aparte de lo anterior, mi vida se puede resumir en trabajo y bicicleta, mientras espero inspiración para la fotografía.
Lo primero es demasiado aburrido, de hacer y de explicar.

Así que vamos con la bici.
Ayer casi nos anochece bajando trialeras, y mañana tengo otra nueva etapa con la Peña El Jamón, todo ello aprovechando que porfin tengo eje de pedalier nuevo y que no hace ruido.
Lo que también tengo nuevo es la posición del pedal derecho. Nunca le he terminado de pillar el punto, y después de las dos salidas de entre semana he tenido molestias en la rodilla y en la cadera. Además estoy hipocondríaco desde que conocí a un chico en la PhotoWalk de Tarragona que se dejó el menisco tras una semana de pedaleando en Irlanda.

A pesar de todo esto, el martes (aprovechando que es festivo en Tarragona) intentaré cumplir mi reto a la Teixeta. Últimamente me siento fuerte y tengo buenas sensaciones, pero se me antoja harto difícil, ya que supondría ponerme al nivel de Enric, cosa que dudo que pueda llegar a conseguir, al menos hasta que no envejezca...

A lo tonto, me está saliendo otro tocho. Hacía tiempo que no escribía en modo automático. Me recuerda a mis largas y solitarias noches de operador, donde escribía correos contando las trivialidades que me sucedían durante el día, y ponía en orden las cosas que pensaba.
Creo que fue por entonces cuando empecé a cogerle gusto a escribir.
De aquel gusto salieron dos historias más o menos definidas para empezar un libro y un blog donde contar chorradas que se me ocurrían. Más tarde salió otra historia mejor definida fruto de todo lo que leía camino de Barcelona.
Nunca terminé nada de lo que empecé por entonces.

Arrastro esa sensación constantemente.
Pero algún día lo escribiré. Mientras saco inspiración de "Un mundo sin fin" y de Wall-E.
Lo primero es el libro que tenía abandonado desde que me regalaron en enero. Creo que está a la altura (si no es mejor) que su primera parte. Los personajes están mejor dibujados y entretejidos. Estoy enganchado.
Lo segundo es la mejor película que he visto en mucho tiempo. Me parece brutal el modo en el que explican casi toda la película sin palabras, sólo con los ojos de los robots y las manos del protagonista, sobretodo los primeros 40 minutos. Según Kami, son unos "putos magos". Estoy planteándome seriamente volver a verla y llenar mi estantería con los dos robots.

Quizás retome algo de escritura cuando tenga portátil nuevo. El viejo comienza a tener síntomas de vejez cuando edito las enormes fotos de la réflex (enormes en tamaño, no en calidad, claro), y además tiene una singular línea vertical verde.
He pensado en tomar en usufructo uno del trabajo, unos HPs guapos guapos. Aunque he mirado unos Dells que tampoco están nada mal y baratillos.
De todos modos creo que esperaré hasta terminar de pagar el coche y me apropie de 230 euros más al mes, y me pillaré uno fino filipino. O a lo mejor me compro uno más cutre y aprovecho para empezar a planear un buen viaje. Me apetece horrores Japón o la Polinesia.
Tengo nueve meses para pensármelo.

Otra cosa que tengo que retomar más pronto es mi afición por los Riskletos. El sábado pasado una amiga pensé en mí y me ofreció un gran cuenco que me hizo sonreír de camino a casa.
Recuerdo que no había merienda completa en el curro sin Risketos.

La comida ya está lista.

Pasos de equilibrista

 

Tengo un nudo en la garganta para hablar,
también tengo un fantasma
en el desván de mi cabeza.
La suerte está tardando en venir,
pido un rescate a quien
me pueda oír antes de que amanezca.
Se han ido todos de la fiesta,
sólo quedo yo en esta orquesta.

Pasos de equilibrista,
tiemblo sobre la pista,

El mundo cambia tan deprisa,
mi corazón juega en la cornisa.

MClan

 

Escornalbou

Hace menos de un año subía al Castell d’Escornalbou.

Por aquel entonces hacía poco que había retomado mi carrera biciclística, y aquella subida se me antojó harto dura.

Hoy he vuelto a subir con la Peña. He cogido la rueda del todopoderoso Enric y he parado el crono en 25’’ 12’, colocando el pulsómetro a 196 cuando el desnivel se ha puesto al 18%.

Hace un año lucía así al término de la subida:

 

Hoy era yo el que hacía esta foto esperando a que llegaran los demás:

Para celebrarlo me he hinchado de comer y beber vino.

Ya me queda menos para cumplir mi promesa y dominar el mundo.
...y mientras en mi cabeza sólo sonará Chemical Brothers.

Las margaritas son flores del campo (again)

Hace tiempo me compré unas margaritas.
Pero al poco tiempo murió fulminantemente, a pesar de haberle aplicado escrupulosamente los cuidados necesarios que hábilmente encontré en una web de jardinería que jamás pensé que visitaría. Me puso de mal humor.

Mi señora madre, que es muy apañá y salá, me vio apenado, y decidió sorprenderme dejándome una maceta enorme con margaritas en el centro de la mesa de mi casa.

Lamentablemente al poco las flores empezaron a secarse y temí que siguiera el mismo camino que su predecesora. Busqué otra página más seria, e incluso le pedí ayuda en un foro a una señora que parecía ser la madre del jardinero de Bricomanía.
Pero no sirvió de nada. Todas las flores se secaron, y con ellas gran parte de mi ánimo.
La planta perdió casi todas las hojas a pasos agigantados, y me resigné a verla palidecer cada mañana un poco más cuando acudía a saludarla, convencido que jamás volvería a verla verde iluminante.
Por el camino perdí además un cyclamen que me regalaron en unas Navidades y que me acompañaba desde que me independicé.

Pero hoy ha sido especial.
Hoy me he levantado para bicicletear por última vez en mis vacaciones y tímidamente escondida ha aparecido una nueva flor. La sonrisa me ha durado toda la mañana, y ahora la tengo al lado de la tele, para verla continuamente y seguir sonriendo.

Es tan pequeña y delicada como poco agraciada, pero a mí me encanta.
Es mi margarita, again.

Vacaciones

Las vacaciones han llegado. Son algo cortas pero bien merecidas.Una foto de Flickr

Aunque ciertamiente vivo mirando el móvil por si algo se rompe y me llaman. Pero parece que el compi se las apaña bien sin mí. Es un artista, rey de la pista.

Así que mi rutina diaria se compone de bici, birras, bici y tropicano. Todo ello regado con música, mucha música. Casi siempre he encontrado canciones que me han descrito situaciones de mi vida. Quizás incluso demasiado. Pero por una vez no quiero escuchar nada de mi vida, quiero escuchar canciones de alcohol, drosga y mujeres fáciles. Pero he descubierto que los grupos de hard rock y heavy son más blandengues de lo que esperaba, y siempre terminan hablando de aquello que no quiero escuchar.

Creo que es momento de darle una oportunidad a la música turca de autor.

 

PD: apuñalaría por la espalda con un hierro oxidado (y luego me mearía en la herida, para que escueza) a toda la familia del creador de snufi, tu peluchito para el móvil.